viernes, 15 de junio de 2012

Ahi

El último velo no se puede descorrer de la verdad. El lenguaje pretende elevarnos a un nivel supuestamente superior que se esconde detrás de la racionalidad. Es lo inefable. Hay que ser pasible para descubrirse en el momento de la acción del presente. Es ahí donde aparece la desnudez de la poesía. Arrojándose más allá de la vida. A la esencia. Para volver al alba del abrazo inicial. Relacionarse con las cosas escuchándolas, demoradamente y destrozando la mirada dominadora. Ahí… es donde aparece mi niñez, Ramiro